Cómo a hacer wax para dabbing: trucos y consejos

El dabbing es el mejor y último método inventado por los consumidores de cannabis para disfrutar de efectos potentes. Los extractos concentrados puros usados para el dabbing no solamente poseen una potencia incrementada, sino que proporcionan alivio instantáneo, junto a sabores refinados. No obstante, los beneficios del dabbing tienen su costo, ya que los concentrados son los productos más caros en las tiendas de cannabis. Muchos consumidores de cannabis se han preguntado cuál es la forma más fácil para preparar dabs en casa. Para ellos, les traemos una respuesta que les permitirá ahorrar dinero en el costo de los dabs, a través de una serie de pasos sencillos para preparar deliciosos concentrados caseros.

¿Qué son los dabs?

Antes de empezar a preparar tus propios dabs, debes entender qué son los concentrados y los extractos de cannabis. Los concentrados se elaboran extrayendo los aceites benéficos de las flores de cannabis. El recubrimiento de cristal que ves en los cogollos de marihuana está formado por los "tricomas", unas glándulas que contienen terpenos y cannabinoides como el THC y el CBD. Al aislar y purificar estos compuestos, se obtiene un producto con consistencia similar al aceite o la cera, el cuál es ideal para el dabbing o para vaporizarlo. Con el auge de las técnicas de extracción, han llegado una amplia gama de productos concentrados al mercado moderno. Para obtener más información sobre cada tipo de concentrado y sus diferencias, visita aquí nuestra guía detallada.

¿Para qué sirve el dabbing?

Los concentrados aíslan a los cannabinoides en altas concentraciones para proveerles de un gran golpe de potencia. De hecho, la mayoría de los extractos presumen de niveles de THC por encima del 90% si se comparan con los porros tradicionales, los cuales tienen niveles de THC de 10-30%. Por esa razón, el dabbing es un método que ofrece altas potencias de cannabinoides para aquellos que necesitan disfrutar de alivio inmediato o tratar dolores y condiciones serias; o para quienes buscan de experimentar grandes potencias. Cuando te des un dab, sentirás los efectos de forma inmediata, y su duración será mucho más prolongada de lo que dura una traba normal.

Muchos conocedores del cannabis prefieren el dabbing por los sabores refinados y penetrantes que contiene. Otra ventaja es que los dabs portables y los vaporizadores son mucho más discretos que fumar marihuana. Si bien te permiten saborear el sabor distintivo del cannabis al inhalarlo, las exhalaciones no tendrán aroma.

Ahora que conoces los beneficios de los dabs, revisemos las mejores formas para prepararlos en casa.

Prepara tus dabs en casa

Si bien el proceso de extracción de aceites de cannabis puede ser complejo, hay muchas formas de hacerlo por tu propia cuenta. Los dabs hechos en casa son altamente potentes y sabrosos, pero se deben tomar ciertas precauciones al elaborarlos para garantizar la seguridad, especialmente cuando se usa el butano o los alcoholes, ya que son sustancias altamente inflamables. También es importante que abras una ventana o uses un ventilador extractor para dispersar cualquier humo. Cuando tengas todo asegurado, podrás aplicar cualquiera de los siguientes métodos para preparar dabs.

¿Cómo preparar dabs con butano?

Este método producirá un tipo de concentrado en forma de “shatter”, ideal para el dabbing o para vaporizarlo. Ten un poco más de precaución con esta técnica, por el uso del butano y del calor. Primero, reúne los siguientes materiales y equipos:

• Butano (preferiblemente N-Butano) – múltiples latas (se necesitan 300ml (10 fl oz) de butano para 30g (1oz) de cogollos)
• Flores de cannabis (30g+ (1oz+))
• Tubo para extracción con pantalla de malla en un extremo
• Dos platos Pyrex (mediano y grande)
• Almohadilla térmica
• Contenedor y raspador para dabs

Primer paso: los cogollos primero

Asegúrate de que los cogollos estén totalmente secos, luego empaca el material firmemente en el tubo de extracción con la pantalla en la parte inferior. Coloca el tubo sobre el Pyrex de tamaño mediano y comienza a soplar butano desde la parte superior del tubo. Sopla hasta que veas gotear aceite líquido en la bandeja inferior, usando la cantidad de butano necesaria hasta que el goteo disminuya o termine.

Segundo paso: deshazte del butano

Luego, coloca el plato mediano sobre el más grande. Agrega agua caliente al plato más grande, dejando que rodee el plato más pequeño. Continúa agregando agua caliente hasta que sea necesario, ya que el butano sube a la parte superior de la solución y se evapora. Este paso te tomará de 15 a 20 minutos. ¡Asegúrate de que la zona tiene buena ventilación!

Tercer paso: purga completamente

Ajusta la almohadilla térmica a fuego alto y coloca el plato sobre la almohadilla. El butano continuará evaporándose en un lapso de 1 a 2 horas. Notarás que la mezcla se aclara completamente cuando no queda ninguna turbidez. Una vez que el material esté frío, puedes raspar el recipiente y almacenarlo en un lugar fresco y oscuro para preservar la potencia y la calidad.

¿Cómo preparar dabs con alcohol?

Preparar dabs con alcohol puede ser ligeramente más seguro que con butano, sin embargo, también implica la manipulación de un líquido inflamable al que se le suministra calor, así que toma las precauciones pertinentes. Mantén la zona de preparación bien ventilada, consigue los siguientes materiales y realiza los siguientes pasos con cuidado.

• Cogollos de cannabis (por lo menos 7g (¼ oz))
• Frasco de vidrio
• Malla coladora
• Filtros de café
• Olla arrocera o una fuente baja de calor (p. Ej., doble caldera o almohadilla térmica)
• Tazones o recipientes de vidrio (por ejemplo, Pyrex)
• Alcohol de grado alimenticio como el Everclear

Primer paso: preparar los cogollos

Para que el método de extracción con alcohol resulte exitoso, tus cogollos de cannabis o tus flores deben estar lo más secas posible. Para conseguirlo, pueden descarboxilar tu marihuana en un horno a bajas temperaturas de 82 a 104°C (por 20 minutos).

Segundo paso: remoja en alcohol

Agrega tus flores secas de cannabis al frasco de vidrio y vierte el alcohol sobre ella hasta que estén completamente cubiertas. Revuelve el material durante aproximadamente 10 minutos.

Tercer paso: colar y purgar el solvente

Coloca el filtro sobre el recipiente de vidrio y ponle filtros de café al filtro para una filtración más efectiva. Vierte la mezcla de cogollos y alcohol en los filtros/colador y deja que el material drene completamente en el recipiente de vidrio. Para purgar aún más el alcohol, deberás usar su fuente baja de calor. Puedes colocar la mezcla en una caldera doble, en una olla arrocera o sobre una almohadilla térmica pero siempre a baja temperatura, o usar un secador de pelo a bajo nivel de calor para soplar la mezcla manualmente. Deja que el alcohol se evapore de la mezcla durante unas pocas horas. Sabrás que la purga se ha completado cuando la mezcla esté pegajosa y cuando no se encienda una llama al prender un encendedor sobre una pequeña cantidad.

Cuarto paso: termina y almacena

Puedes verter la mezcla en un recipiente para almacenarla o colocarla sobre papel pergamino. La mezcla se puede enfriar en un congelador o refrigerador para facilitar su disposición.

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¿Cómo hacer tus dabs con una plancha para pelo?

Hasta ahora, este método es el más simple y produce un concentrado similar a la colofonia (rosin) utilizada en el dabbing. Solo necesitarás algunos ingredientes que seguro están disponibles en tu hogar.

• Cogollos de cannabis
• Papel pergamino
• Plancha para pelo

Primer paso: calienta los cogollos

Enciende tu plancha de pelo a temperatura media. Dobla el papel de pergamino por la mitad para crear una caja tipo bolsillo. Coloca el cannabis en el papel de pergamino y dobla la parte superior. No sobrecargues el papel pergamino; usa pequeñas cantidades a la vez. Pasa la plancha para el cabello sobre el papel de pergamino durante aproximadamente 5 segundos o hasta que veas un extracto de aceite amarillo salir de la flor de cannabis. Puedes repetir este paso hasta que la flor deje de producir aceite.

Segundo paso: almacena tu dab

Una vez que tus cogollos han quedado sin aceite, use una cuchilla de afeitar o una herramienta de raspado para recoger el aceite y almacénalo dentro de un recipiente de vidrio.

¿Cómo hacer aceite de THC para vaporizar?

Aunque este método requiere de bastante tiempo para completarse, al final, obtendrás suficiente aceite casero de THC para dabbing, o para almacenarlo en cartuchos de vaporizadores. Para aplicarlo necesitarás:

• Cogollos descarboxilados de cannabis (calienta los cogollos como se describió en el método con alcohol) – 3.5g o ⅛ oz producirán de 30 a 60 ml de aceite
• Glicerina vegetal de grado alimenticio
• Recipientes de vidrio herméticos (los frascos de cristal son ideales) o tazones de vidrio
• Un utensilio para agitar (un cuchillo para mantequilla servirá)
• Espátula pequeña de goma
• Colador de malla
• Jeringas para transferir el aceite a los cartuchos de los vaporizadores

Primer paso: remoja los cogollos en glicerina vegetal

Coloca tus cogollos de cannabis descarboxilados en un frasco hermético y sellado, y vierte glicerina vegetal sobre ellos, lo suficiente como para cubrirlos. Revuelve la mezcla y sella el frasco y almacénalo en un área fresca y oscura durante 3-4 semanas. Después de 3-4 semanas, vuelve a abrir el frasco y revuélvelo generosamente. Agrega una cucharada adicional de glicerina vegetal a la mezcla, revuelve bien y almacena durante otras 3-4 semanas en el mismo lugar fresco y oscuro.

Segundo paso: colar la mezcla

Después de transcurrido el tiempo de remojo, abre el frasco y revuelve completamente con el cuchillo de mantequilla o tu herramienta para agitar. Coloca tu colador de malla sobre un recipiente de vidrio u otro frasco limpio. Deja que la mezcla gotee a través del colador y usa la espátula para presionar y extraer la mayor cantidad posible de líquido de los cogollos. Luego colarás la mezcla una vez más, esta vez con una estopilla sobre el colador. Busca otro tazón limpio y coloca la gasa en el colador. Pon el colador sobre el tazón y vierte la mezcla en él y vuelve a colar. Exprime la estopilla para extraer la mayor cantidad de líquido posible.

Tercer paso: almacena el aceite

Ahora que la mezcla está completamente filtrada, puedes usar una jeringa o un gotero para llenar los cartuchos o los vaporizadores. También puedes verter la solución filtrada en un frasco y almacenarla para usarla después.

Equipo necesario para usar los dabs

Sea que hayas preparado tus propios dabs o los hayas comprado hechos, hay unos cuantos métodos para consumir este potente material. La forma más común de consumirlos en con un rig para dabbing o con un bong. Abordaremos todas las opciones para consumir dabs a continuación:

Utilizando un dab rig

Esencialmente, un dab rig es un bong de agua con una cámara especial en donde se pueden colocar tus concentrados de cannabis para vaporizarlos. Deberás usar una antorcha para calendar la cámara, de tal forma que las altas temperaturas ayuden a vaporizar el dab. Utiliza la boquilla para inhalar el vapor y experimentar los efectos inmediatos de tu dab.

Porros, pipas o blunts

La mayoría de los concentrados de cannabis son fluidos flexibles que se pueden agregar a tus porros, pipas o blunts. Puedes llenar tus pipas como lo haces normalmente, o moler la hierba para enrollarla en un porro o en un blunt. Dependiendo de la consistencia, puedes verter el concentrado sobre los cogollos, o dividirlo en trozos más pequeños y espolvorearlo sobre material para fumar.

Vaporizadores

Los vaporizadores recargables con atomizador son una buena opción para utilizar tus dabs.  Simplemente abre la cámara donde se encuentra el atomizador y coloca tu dab en el para calentarlo. Conecta la boquilla, enciéndela, deja que se aplique el calor e inhala normalmente.

Experimenta los potentes efectos del dabbing

El dabbing ha aumentado su popularidad, gracias a sus efecto y sabores potentes. A pesar de que los concentrados de cannabis son caros por sus beneficios y potencia, como te diste cuenta, existen muchas formas fáciles para prepararlos en casa. Con mucha atención y tomando las precauciones necesarias, podrás producir dabs con cualquiera de estos métodos, utilizando tus cogollos preferidos de cannabis. Sin importar la forma en que utilices tus dabs, el dabbing es una técnica que resulta beneficiosa para todo tipo de consumidor.

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