Informe de fumada de la Trippy Gorilla: una experiencia psicodélica

Quiero compartir mi primera experiencia con la Trippy Gorilla de Big Head que yo misma cultivé desde la semilla. No fue mi primer cultivo, ni mi primera variedad Sativa, pero el viaje realmente se ha destacado.

Escogí un miércoles por la tarde para probar mi Trippy Gorilla por primera vez. Era mi día libre y habían pasado exactamente 3 semanas desde que la había puesto a curar. Los cogollos se veían hermosos: frescos y con colores brillantes, con pelos rojizos y algunos tonos morados. Todo esto cubierto por una gruesa capa de resina. Cuando los frascos estaban cerrados, todo mi armario olía a café, pero cuando los abría, podía sentir rápidamente el intenso aroma a pino, con toques frutales y algo de lúpulo.

Trippy Gorilla de Big Head Seeds

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Todo comenzó así…

Decidí fumar en casa con mi pipa de agua para luego dar un paseo en bicicleta hasta el parque más cercano. Una vez en el parque, pensaba fumar un poco más con una pipa pequeña que suelo tener a mano cuando no estoy en casa. Dividir la fumada en dos rondas fue la mejor manera de apreciar el sabor, ya que la primera dosis de THC agudizó mis sentidos y me convirtió en una especie de catadora experta.

Así que fumé un poco en casa y fui a dar una vuelta. Debido a la cantidad de THC de la Trippy Gorilla, el humo era un poco áspero para mi garganta y pulmones. Se sentía picante y me hizo toser bastante.

El paseo desde mi casa hasta el parque toma unos 20 minutos. Era una hermosa tarde de primavera, con algo de viento, pero realmente cálida y soleada. El tráfico era ligero debido a la Covid, lo cual fue positivo porque si bien soy una fumadora habitual, el 25% de THC de esta cepa me había intimidado un poco.

Trippy Gorilla: efectos visuales suaves y una alta concentración

Los efectos se activaron a mitad de camino. De repente estaba muy concentrada en cómo mis pies empujaban los pedales y hasta podía sentir el ruido de los neumáticos recorriendo mi cuerpo. Cada vez que las ruedas golpeaban una grieta o una pequeña roca, sentía una sacudida de alegría en el pecho y la espalda. En ese momento, comencé a sentir que el aire se volvía más espeso, como si estuviera bajo el agua o dentro de una sustancia cristalina. Incluso podía percibir ondas brillantes y manchas en mi visión periférica. Cuando traté de ver qué era, me di cuenta de que solo era mi imaginación. La sensación de estar bajo el agua fue aumentando gradualmente, y de repente me di cuenta de que casi había llegado a la cima de una colina muy empinada. Una colina que siempre suelo subir a pie llevando mi bicicleta al lado. ¡Y ni siquiera había cambiado la velocidad de la bicicleta!

En ese momento me bajé de la bicicleta y comencé a caminar. Podría decirse que me perdí en el proceso de caminar y solo desperté al llegar al pie de la colina. Continué así durante un tiempo, completamente concentrada en lo que estaba haciendo para luego darme cuenta de lo que me rodeaba.

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Visito este parque con regularidad así que puedo decir que lo conozco bastante bien. Sin embargo, podía percibir una sensación extraña: de a ratos, perdía la noción de donde me encontraba. Por momentos, incluso me parecía estar en otra ciudad, a miles de kilómetros de distancia. Sé que he dicho “Por momentos”, pero la verdad que esa sensación duró mucho tiempo. Hubo un largo rato en el que me sentía en el parque, pero de a ratos en otro lugar, y luego en el parque nuevamente. Finalmente, pude superar esa sensación, sin embargo, no podía evitar sentirme en ambos sitios al mismo tiempo, casi como si estuviera viajando a través de un portal.

Estaba disfrutando inmensamente este momento, pero había llegado el momento de la segunda parte de mi plan.

Las reseñas de la Trippy Gorilla que había leído eran verdaderas: se trataba de una variedad muy fuerte. Al principio la idea era fumar solo un poco, pero luego decidí que quería experimentar el viaje completo así que fumé un poco más en el parque. Elegí un buen lugar soleado que estuviera fuera del camino. Más tarde, me di cuenta de que esta fue la mejor decisión, ya que después de la segunda ronda, tuve ganas de acostarme.

Como era de esperarse, ahora el aroma y el sabor se sentían maravillosos. Al principio tenía puesta toda mi atención en el humo sin pensar mucho en su sabor, pero luego comencé a saborear cada nota luego de cada exhalación. El olor era muy fuerte y se caracterizaba por tener notas de pino y eucalipto, pero también de cítricos. Traté de encontrar un nombre para el sabor, pero solo tenía una palabra en la mente: miel. Tenía un sabor tan dulce in ser realmente dulce, casi como una alucinación sensorial.

Una variedad Gorilla con efectos psicodélicos

Como mencioné antes, sentí un fuerte deseo de acostarme. Tan pronto como cerré los ojos, comencé a ver imágenes muy realistas. En este caso se trató de una interminable sucesión de cercas, setos, muros de casas y portales, calles con todas sus grietas y hojas caídas. De repente me di cuenta de que estaba viendo todo esto desde la altura de una niña de tres o cuatro años, y que lo que estaba viendo era la ciudad donde crecí. Sabía que tener una sobredosis de marihuana era imposible, pero no podía evitar pensar que me estaba muriendo y que lo que estaba viendo era un resumen de mi vida. Fue un poco aterrador pero también algo bonito.

Realmente no sé cuánto duró ese estado, pero, en algún momento, pude sentir una nueva sensación. Esta vez, una sensación completamente física. Sentía demasiada euforia en todo el cuerpo. La euforia venía en oleadas, haciéndome estremecer de placer — casi como un orgasmo. Decidí sentarme y cerrar los ojos. Al abrirlos, me di cuenta de que el sol se había movido y que ahora me encontraba a la sombra de un árbol tiritando de frío. Afortunadamente, en ese momento, los efectos ya habían disminuido, así que me monté en mi bicicleta y regresé a casa.

Trippy Gorilla de Big Head Seeds: ¡un viaje psicodélico!

Ha sido una experiencia inolvidable, pero también muy intensa. No sé si tengo ganas de repetirla. A esta altura, ya he fumado el resto de mi cosecha. A veces sola y a veces con mis amigos o con mi novio, pero siempre con moderación, disfrutando del enfoque y la euforia que produce esta increíble variedad. Todavía me quedan algunas semillas de la Trippy Gorilla y pienso germinarlas tan pronto como termine mi cultivo actual.

¡Espero que hayan disfrutado de mi reseña de la Trippy Gorilla!

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