Las maravillas del microcultivo: cultivando marihuana en espacios pequeños

Si eres de los que cuenta con poco espacio para cultivar varias plantas de marihuana, deberías considerar el microcultivo como una opción para sacar adelante tu siembra. Lo único que vas a necesitar es un par de metros cuadrados para instalar en tu closet un armario de cultivo casero, o sembrar dentro de un vestidor o en tu jardín. Aunque un microcultivo es un tipo de cultivo a pequeña escala, eso no quiere decir que sea fácil de realizar. Por eso, tendrás que prestar atención a cada detalle, teniendo en cuenta la luz, el ambiente y la variedad seleccionada.

¿Cómo se hace un microcultivo?

TEl enfoque de este artículo está en el microcultivo, la cual es una técnica discreta para el cultivo de marihuana interior. Este método trata de diseñar zonas de cultivo en espacios confinados, ajustando los elementos esenciales que las plantas necesitan para crecer de forma saludable: agua, nutrientes, aire y luz. El microcultivo es perfecto para cultivar unas cuantas plantas dentro de espacios pequeños como los armarios. Para mantener una siembra discreta y a las plantas pequeñas, los cultivadores necesitarán prestar mucha atención a la cantidad de vatios de luz, los niveles de fertilizantes a utilizar, el tipo de medio seleccionado (sustrato o hidroponía) y la variedad seleccionada. Tu objetivo principal será crear y mantener las condiciones óptimas para que tus plantas de cannabis puedan florecer dentro de un espacio limitado.

Trucos y concejos para cultivos de marihuana interior discretos

Si tu intención es priorizar la discreción, el cultivo de marihuana interior es tu mejor opción para mantener control del olor y el sonido, y, por supuesto, la exposición de tus plantas. El cultivo al aire libre puede ser riesgoso por muchas razones. Si decides hacerlo lejos de tu vivienda, habrá una alta probabilidad de que alguien lo pueda descubrir o destruir. Si decides cultivar al aire libre dentro de tu propio jardín y sin que nadie te detecte, deberás cultivar plantas de marihuana pequeñas o entrenarlas para que permanezcan arbustivas e indetectables. Así mismo, hay algunas variedades que emiten poco olor, como la Northern Lights y la Blueberry. Otra opción es sembrar plantas de lavanda, madreselva y jazmín para ocultar el olor de tus plantas de marihuana.

Por otro lado, los cultivadores de interior tendrán que considerar estos asuntos de otra forma. El control del olor de las plantas deberá ser controlado por medio de filtros de carbón o ductos de ventilación en la zona de cultivo y, posiblemente, con el uso de neutralizadores de olor como velas y aerosoles para las otras áreas de la casa. Los ventiladores hacen bastante ruido, así que trata de conseguir ventiladores pequeños, ya que hacen menos ruido. Finalmente, se discreto con el manejo de los desechos, trata de sacar la basura el mismo día en que será recogida.

En general, se inteligente, atento y discreto!

Los mejores espacios para los microcultivos

El espacio ideal para llevar a cabo tu microcultivo de interior es un armario de cultivo. Estas carpas vienen diseñadas con ductos de ventilación para ventiladores, cuentan con material reflectivo en su interior y son buenos para mantener a los insectos alejados. Si estás buscando algo más discreto que un armario de cultivo, puedes transformar tu ropero en un espacio de microcultivo. Este método puede ser más fácil que armar un armario de cultivo, ya que lo único que necesitas instalar son ventiladores, luces, y forrar las paredes con materiales reflectivos antes de empezar a cultivar. Por otro lado, las cajas de cultivo discreto son una forma inteligente de esconder tu siembra de los chismosos. Estas cajas son disfrazadas como mesas de noche o tocadores, o incluso son torres de computador convertidas en cajas de cultivo discreto, las cuales funcionan de manera genial para esconder la luz y el ruido de los ventiladores.

Ahorra espacio cultivando plantas de marihuana pequeñas

Escoger la variedad correcta es importante para el microcultivo. Las sativas son plantas altas y más esbeltas que las índicas, que son más pequeñas y rechonchas. Determinar la altura de las plantas es importante, porque muchas de ellas se pueden quemar si crecen muy cerca de la luz. Ten en mente que muchas variedades pueden crecer de manera exponencial durante la fase de floración, una variable que se debe considerar desde la fase de vegetación y mientras armas tu zona de cultivo. Si el tamaño es un problema, una variedad autofloreciente para microcultivo es tu mejor opción. Las variedades autoflorecientes tienen una fase vegetativa más corta (3 a 4 semanas), lo que quiere decir que no crecen demasiado antes de empezar a florecer. Hay muchas plantas de marihuana pequeñas y autoflorecientes para cultivo interior, entre ellas te podemos recomendar a la Royal Dwarf Auto si estás buscando una sativa, o a la Auto White Widow si estás más interesado en experimentar sensaciones de índica.

Además de escoger una planta pequeña para interior, hay métodos de entrenamiento que te pueden servir para controlar el problema de la altura como el topping y el LST, los cuales explicaremos más adelante.

Escoge el medio de tu microcultivo: ¿sustrato o hidropónico?

Una forma de controlar el tamaño potencial de tu planta es con la cantidad de sustrato que le suministras. El sistema de raíces es esencial para el desarrollo de las plantas, ya que es el órgano que les permite absorber agua y nutrientes. Usa este dato a tu favor. Por ejemplo, una planta promedio necesita cerca de 12 litros (3,17 galones) o más de sustrato. Al reducir la cantidad de sustrato a 5 litros (1,3 galones), las plantas permanecerán pequeñas sin pasar de los 60 cm (2 pies). Más aún, si reduces la cantidad de sustrato a la mitad, las plantas crecerán entre 24 y 30 cm (0,8 – 1 pie). Si vas a usar cantidades pequeñas de sustrato, compensa tus plantas con las cantidades adecuadas de fertilizantes y agua para que crezcan sanas.

Usar una caja de cultivo hidropónico puede reducir las cantidades de espacios necesarios para cultivar, aunque este método requiere de muchos más materiales. Honestamente, el punto negativo de los sistemas hidropónicos es el mantenimiento. Las reservas de agua deben ser limpiadas de forma regular, o las raíces de tus plantas quedarán expuestas a la pudrición. Vigila de cerca la temperatura y la humedad, porque el moho puede prosperar en condiciones ambientales húmedas.

Las luces ideales para tu microcultivo

Si quieres que tu cultivo de marihuana interior prospere, vas a tener que suministrar luz. Mientras mejores sean tus luces, mejor será la calidad de tu marihuana. Por eso, te recomendamos usar luces LED o CFLS (compact fluorescent lamps), ya que no emiten tanto calor como otros tipos de bombillas. Al momento de seleccionar el tipo de luz, vigila de cerca los vatios y el calor. Lo ideal es que cuentes con cerca de 100W de luz por cada planta.

Luces LED

Las luces LED son perfectas en un cultivo de interior para principiantes, porque son fáciles de manipular y de instalar. Este tipo de luz produce poco calor, pero esto no será un problema mientras que mantengas ajustada la potencia y la ventilación del espacio. Si tus luces LED son demasiado fuertes, tus plantas no se quemarán, pero la intensidad puede blanquear las hojas y disminuir su crecimiento. Un nivel de potencia entre 270 y 360 W será perfecto para un microcultivo con luces LED.

Luces CFL

La luces CFL, en forma tubular o de bombillas, son una buena opción por dos razones: dan uso eficiente a la energía y no producen demasiado calor. Es posible que no se obtengan los mismos rendimientos que con las luces LED, debido al límite en la fuerza de la luz, pero el poder escoger entre distintos colores claros lo compensa. Durante la fase de vegetación, el cannabis prefiere de una mayor concentración de luces azules, mientras que demanda de más luz roja durante la fase de floración. Usa distintos tipos de luces CFL para conseguir los mejores resultados.

Las plantas necesitan de minerales y vitaminas para crecer

Como estás cultivando una menor cantidad de plantas, vas a tener que cuantificar la cantidad de nutrientes a utilizar. Calcula primero la relación entre agua y nutrientes sugerida en nuestro gráfico de fertilización, después divide la cifra por la mitad. Tus plantas crecerán pequeñas en un microcultivo, así que no van a necesitar la misma cantidad de nutrientes que cuando crecen a lo natural. Ten en cuenta lo siguiente: cuando las hojas de tus plantas se amarilleen o marchiten (algo conocido como quemado por exceso de nutrientes), es posible que se te haya ido la mano fertilizando. No te preocupes: solo necesitas reducir tus nutrientes en un 25% y luego aumentarlos gradualmente si es necesario.           

Control ambiental: calor, humedad y pestes

En lo que tiene que ver con el control de las condiciones ambientales, lo más importante es saber administrar la filtración, el flujo de aire y la temperatura. La circulación de aire en el cultivo de marihuana interior es importante para su crecimiento, ya que el dióxido de carbono es usado rápidamente y debe ser reabastecido de forma que las plantas puedan continuar con su desarrollo. Hay muchos tipos de ventiladores disponibles en el mercado, y lo recomendado es ubicar uno en la parte baja y otro en lo alto de la zona de microcultivo. Lo anterior servirá para prevenir la deshidratación de las plantas, manteniendo la temperatura y la humedad ajustadas. El calor emanado por las luces puede ser peligroso si tus plantas crecen mucho, así que se diligente con su mantenimiento. También asegúrate de incluir filtros en tus ventiladores para mantener a tus plantas libres de polvo, moho y pestes.       

¡Aprende a entrenar a tus plantas!

Hay muchas formas de mantener a tus plantas de cannabis lo más pequeñas posibles. Además de las variedades autoflorecientes, las cuáles crecen poco, y los sistemas hidropónicos, los cuales eliminan la necesidad de sustrato, puedes aprender a entrenar a tus plantas para controlar su tamaño. El crecimiento de una planta puede ser influenciado con la aplicación de técnicas como el topping o el LST, por ejemplo, no solo para mantenerla a un tamaño específico, sino para incrementar sus rendimientos. La mayoría de estar técnicas implican el doblado y la poda de las partes altas de la planta, lo que aumenta la exposición a la luz de las ramas bajas. Revisa nuestro artículo sobre las técnicas de entrenamiento de bajo y alto estrés (LST y HST) para aprender mucho más.

¡Muchas veces, menos es más!

El microcultivo es una técnica de cultivo discreta e ideada para aquellos cultivadores que no cuentan con suficiente espacio o que simplemente quieren mantener a sus plantas bajo control. Las torres de computador son una de las mejores formas de mantener a tus plantas escondidas de miradas intrusas. Si se te ocurre alguna otra forma de microcultivo, comparte tu ingenio en la sección de comentarios y deja que otros cultivadores aprendan de tus conocimientos.

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