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Si quieres adentrarte en el mundo del cultivo de la marihuana, es posible que te encuentres con palabras como "fotoperiodo", "feminizada" y "autofloreciente" en tu búsqueda para conseguir semillas. Las autoflorecientes, en concreto, son uno de los tipos de semillas más comunes con los que te encontrarás. Si vas a empezar a cultivar tu propio cannabis, es importante que consideres todas las opciones disponibles. Sigue leyendo y te explicaremos qué ofrecen las autoflorecientes.
Cannabis autofloreciente: Definición del término
El cannabis autofloreciente es un cruce entre la planta Cannabis Sativa o Cannabis Indica y el Cannabis Ruderalis. El Cannabis Ruderalis es una subespecie de marihuana que procede de las regiones de Asia Central, Siberia, Rusia y Europa del Este. La Ruderalis se ha adaptado para sobrevivir en climas duros donde la Sativa o la Indica normalmente no lo harían; la Ruderalis también es capaz de producir flores independientemente de su consumo de luz. Ruderalis proviene de la raíz latina "rudus", que significa "escombros", un nombre adecuado para una planta que puede sobrevivir y producir flores casi en cualquier lugar donde crezca. Del mismo modo, gracias a este parentesco, el cannabis autofloreciente es resistente y puede empezar a florecer independientemente de su horario de luz.
Beneficios del cultivo de cannabis autofloreciente
Las variedades autoflorecientes tienen varias ventajas que las hacen preferibles para muchos cultivadores en comparación con las variedades de fotoperiodo. Además de su capacidad para crecer en prácticamente cualquier tipo de entorno y en cualquier época del año, hay otros muchos factores que hacen que la marihuana autofloreciente sea la favorita de los cultivadores.
Discreción inigualable
Una de las ventajas de la marihuana autofloreciente es su menor tamaño. Las autoflorecientes aportan discreción a los cultivadores al poder crecer en espacios reducidos, en balcones o en jardines domésticos, ya que no suelen superar una altura de 60-100 centímetros (unas 24-39 pulgadas). Estas plantas más pequeñas son perfectas para los que quieren mantener su cultivo discreto y tienen un espacio limitado.
Crecimiento acelerado
Las cepas autoflorecientes progresan a un ritmo mucho más rápido que las plantas de fotoperiodo. Las cepas autoflorecientes completarán todo su ciclo de crecimiento en el tiempo que tarda una planta típica de fotoperíodo en terminar de florecer sola, que es de 7 a 10 semanas. Debido a que pueden producir múltiples cosechas por temporada en comparación con una cepa de fotoperiodo, las autoflorecientes son excelentes para aquellos que son un poco impacientes en la producción de cannabis y quieren ver resultados rápidos.
El poder de resistencia de las autoflorecientes
La hierba autofloreciente también es excelente para repeler una multitud de problemas comunes que se ven a menudo con las cepas de fotoperiodo. Si se comparan las cepas de fotoperiodo con las autoflorecientes, estas últimas son más adecuadas para resistir el moho, las plagas y los problemas comunes asociados con la sobrealimentación o la subalimentación de las plantas. Esto se debe al hecho de que el Cannabis Ruderalis se ha adaptado a crecer en climas más duros con condiciones temperamentales.
¿Cuánta luz? Ya no es tan importante
Dado que el cannabis autofloreciente comienza a producir cogollos independientemente de la entrada de luz diaria, no tendrás que seguir un horario de luz estricto para que tus plantas entren en la fase de floración. En su lugar, puedes cumplir con una variedad de horarios de iluminación diferentes que dependen más del rendimiento que desees obtener. Las cepas autoflorecientes tampoco son susceptibles a la contaminación lumínica (farolas, iluminación interior, etc.), ya que están diseñadas para crecer independientemente de la cantidad de luz que reciban.
Ahorrar en la alimentación
Otra ventaja del cannabis autofloreciente es que no necesita ser alimentado tan a menudo y tanto como otras plantas, lo que en última instancia puede ahorrarte dinero en fertilizantes y suplementos de nutrientes. Las cepas autoflorecientes tienen un tamaño pequeño y maduran bastante rápido, por lo que no necesitan la misma cantidad de nutrientes para florecer que otras cepas. Asegúrate de alimentarlas ligeramente, aunque las autoflorecientes pueden soportar los daños causados por la sobrealimentación si se detienen una vez que se detectan los primeros signos de ello.
Mayor porcentaje de CBD
Las cepas autoflorecientes también suelen tener más CBD que las cepas de fotoperiodo. Mucha gente prefiere las cepas autoflorecientes por sus altos niveles de CBD y sus beneficios medicinales, además de su capacidad para inducir una sensación de lucidez y claridad. Esto depende definitivamente de las preferencias personales, pero si buscas cultivar hierba con un alto contenido de CBD, las autoflorecientes serán probablemente tu tipo de cannabis preferido.
Desventajas del cultivo de cannabis autofloreciente
Aunque hemos visto que el cultivo de cannabis autofloreciente tiene muchas ventajas, también tiene sus inconvenientes. Las autoflorecientes no rendirán tan bien ni darán frutos durante tanto tiempo como sus homólogas de fotoperiodo; aquí veremos exactamente qué podría hacerte reconsiderar la compra de semillas autoflorecientes.
No es suficiente para tu inversión
Una de las desventajas de cultivar una variedad autofloreciente es el bajo rendimiento que obtendrás de tu planta. Esto se debe al pequeño tamaño y al corto ciclo de vida de las plantas autoflorecientes; simplemente no tienen suficiente tiempo para alcanzar la altura de la típica Cannabis Sativa o Cannabis Indica para que puedas obtener una mayor producción de cogollos. El rendimiento de una autofloreciente podría ser suficiente para el uso personal, pero si buscas un mayor rendimiento de tus plantas, sería mejor que probaras los fotoperiodos.
Niveles más bajos de THC
Otra desventaja del cultivo de autoflorecientes es que suelen tener menos THC que las variedades de fotoperiodo. En primer lugar, los cogollos de tus variedades autoflorecientes no tienen tanto tiempo para madurar y deben cosecharse antes que muchas de sus homólogas sativas o índicas, y por lo tanto, no pueden producir niveles más altos de THC. En segundo lugar, su herencia genética incluye la Ruderalis, que es conocida por producir un efecto bajo o nulo. Sin embargo, siempre hay nuevas cepas autoflorecientes que se desarrollan, por lo que ahora es posible encontrar cepas con más THC que en años anteriores.
Costes de electricidad despiadados
Dependiendo de cómo elijas cultivar tus autoflorecientes, puedes enfrentarte a altos costes de electricidad. Dado que tus autoflorecientes producirán cogollos independientemente de su horario de iluminación, cuando se cultivan en interior, las luces pueden dejarse encendidas durante 24 horas seguidas sin dañar la planta, lo que hará que esta alcance su estado de floración más rápidamente. Incluso si se deja en un horario de iluminación de 18 encendidos/6 apagados, todavía se puede hacer frente a los altos costos de la electricidad para cultivar sus plantas en el interior.
No hay posibilidad de entrenar a tus autoflorecientes
Como las cepas autoflorecientes no tienen mucho tiempo para recuperarse del estrés debido a su corto ciclo, no son muy adecuadas para el entrenamiento. El entrenamiento de alto estrés solo disminuirá el rendimiento de tu planta y puede incluso causar daños permanentes en su integridad. Aunque el entrenamiento de bajo estrés tampoco es ideal, es la única opción adecuada si estás interesado en entrenar tu planta; las autoflorecientes no producen una gran canopia, por lo que el LST puede ayudar a tu planta a desarrollar una canopia más grande fomentando el crecimiento de ramas más pequeñas.
No se puede clonar
Si estás cultivando cannabis y te encariñas con una cepa en particular, ya sea por su capacidad de crecimiento rápido o por la calidad de las flores que produce, es posible que quieras tomar un recorte y cultivar otra planta idéntica. Sin embargo, dado que la vida de una autofloreciente es tan corta, cualquier intento de clonar tu autofloreciente solo dará como resultado una planta poco desarrollada que ni siquiera llegará al final de su fase de floración antes de que su vida termine.
Los mejores consejos para cultivar con éxito las autoflores
Tanto si tienes experiencia en el cultivo de cepas de fotoperiodo como si no, las cepas autoflorecientes requieren cierto tipo de cuidados que difieren de los de una cepa típica de fotoperiodo. Sigue estos consejos para asegurarte de que cuidas correctamente tus autoflorecientes.
Lo justo: No sobrealimentes tus plantas autoflorecientes
Aunque las autoflorecientes son bastante resistentes cuando se trata de resistir muchas amenazas que pueden afectar al cannabis, es muy importante vigilar uno de los principales enemigos de las cepas autoflorecientes: la sobrealimentación. Las autoflorecientes, por su tamaño y ciclo de vida, no necesitan tantos nutrientes como las variedades de fotoperiodo. En este caso, fertilizar en exceso tus plantas puede causar daños a la planta, impactar negativamente en su rendimiento, e incluso potencialmente matarla.
¡Colas primero! Cosecha correcta de los cogollos
La fase de vegetación de tu autofloreciente es tan corta que normalmente no tiene tiempo suficiente para desarrollar una canopia fructífera para tus cogollos. Por lo tanto, es importante cosechar tus cogollos gradualmente, empezando por las colas primero, ya que habrán tenido más tiempo para desarrollarse. Los cogollos de la parte inferior del árbol necesitarán más tiempo para desarrollarse y, por lo tanto, deben cosecharse en último lugar.
Preparando tu próximo crecimiento
Si estás disfrutando de tus plantas autoflorecientes, ya puedes preparar tu próxima cosecha antes de que tus autoflorecientes hayan terminado su ciclo. Adquiere tus semillas antes de cosechar tu planta actual para asegurarte de que no haya huecos entre los ciclos de crecimiento. Puedes preparar tu próxima cosecha mientras cosechas tu planta actual y, debido a la velocidad de crecimiento de una autofloreciente, tener una fuente consistente de cannabis.
Variedades autoflorecientes - La mejor opción para los principiantes
Las variedades autoflorecientes son la mejor opción para los principiantes que nunca han cultivado una planta de marihuana. Las autoflorecientes son muy indulgentes cuando se trata de errores comunes cometidos por los principiantes y pueden ser utilizadas como una buena práctica para aquellos que quieren llegar más lejos en el cultivo. La hierba autofloreciente también es estupenda para aquellos que quieren producir pequeñas cosechas de forma puntual, o para tener una experiencia de cultivo más discreta.
Autoflorecientes - Podrían ser para ti
Ahora que entiendes lo que es el cannabis autofloreciente y los pros y contras de usar semillas autoflorecientes, puedes estar mucho más informado a la hora de elegir el tipo de semilla que deseas cultivar. Las variedades autoflorecientes tienen varias desventajas, pero puedes encontrar que sus pros superan a los contras en su capacidad de producir marihuana frecuentemente, en cualquier momento, en un corto periodo de tiempo. Aunque depende de tus deseos de crecimiento personal de marihuana, puedes encontrar que las cepas autoflorecientes son perfectas para tus necesidades.
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